Debido a que los reguladores de voltaje mecánicos deben mover físicamente los componentes, su velocidad para corregir las fluctuaciones del voltaje de salida es muy lenta. Los AVR mecánicos miden el tiempo de corrección en voltios por segundo, por lo que cuanto mayor sea la corrección de voltaje requerida, más tiempo llevará la corrección. Este tipo de actividad puede tomar de medio segundo a decenas de segundos, mucho más de lo que pueden tolerar muchas cargas electrónicas modernas.
Ventajas de los reguladores de voltaje de conmutación
Los reguladores de voltaje de conmutación tienden a tener mayores requisitos de mantenimiento que las unidades de inducción magnética. Ya que el regulador de voltaje de inducción magnética tiene pocas o ninguna escobilla o contactor que se desgaste. Con cualquiera de los dos tipos, los requisitos de mantenimiento están directamente relacionados con la frecuencia de la corrección de voltaje: cuanto más se mueva, más mantenimiento será necesario.
Debido a que el mantenimiento de los cambiadores de tomas en carga para aplicaciones muy grandes puede ser bastante costoso. A menudo tienen retrasos de tiempo y otras capacidades integradas en sus controles para minimizar la frecuencia de cambio de tomas. Estas unidades suelen tener intervalos de revisión recomendados que van desde 500.000 a 1.000.000 de operaciones.
En aplicaciones de calidad de energía; sería contraproducente tener demoras u otras limitaciones en la operación de los reguladores de voltaje de inducción de servo o conmutación de tomas. Afortunadamente, estas unidades suelen ser enfriadas por aire, de menor tamaño y relativamente accesibles en comparación con el OLTC de servicios públicos.
Ventajas que ofrecen estos sistemas
Las ventajas de los AVR mecánicos, ya sean de cambio de toma o de inducción magnética, varían según el diseño, pero generalmente incluyen:
- Regulación de voltaje de salida muy precisa
- Amplia variedad de valores nominales de kVA, voltaje y configuración
- Fácilmente aplicable a la aplicación al aire libre
- Alta tolerancia a fallas del sistema y sobrecarga
- Alta tolerancia al factor de potencia y desviaciones de frecuencia
- Buen aislamiento de línea
- Relativamente barato
Además de estas ventajas, los reguladores de voltaje de servoinducción, también proporcionan un voltaje de salida muy uniforme en comparación con la conmutación discreta que se produce en los cambiadores de tomas.
